Bandera de Venezuela. Ávila. Foto: José Molina |
Hugo Chávez gana las elecciones de 2012 con un 54% de los votos.
No quiero reflexionar de las razones que lo llevan a esta victoria, pero sí de
las consecuencias de tener a este presidente, por al menos, 6 años más.
Estoy seguro que la base más sólida del presidente son los
pobres, no solo aquellos que les hace falta el pan en la mesa sino también a quienes
no les importa superarse para tenerlo. Aquellos que llevan 54 años de prebenda
con el gobierno, en la 4ta y la 5ta república. Estos últimos sin ningún
escrúpulo por dañar a sus compatriotas o su país. Lo único importante son las
divisas que esos 54 años les pueden dejar.
No puedo responder a las frases de “¿Es que acaso cuando CAP
y Luis Herrera eso no lo hacían?” Seguro que sí, pero yo era un niño y no puedo
asumir responsabilidad por ese pasado. Pero por el futuro si puedo dar mi
visión y mis palabras.
Ese pueblo pobre, sea cual fueran sus raíces, son la base
sólida con la que cuenta el presidente, así que algo es seguro, éste nunca hará
algo concreto para acabarla, no puede, no debe. Sin ellos él no sería nadie.
Así que estoy seguro que a pesar de sus planes sociales, siempre tendrá la
forma de hacerlos ineficientes, denigrantes, populistas. Siempre tendrá a
gerentes incapaces que no puedan brillar con luz propia, que no puedan
distinguir entre lo que se debe hacer y lo que se hace.
Seguro estoy que no será posible disminuir la inseguridad,
porque controlar a los delincuentes es ir contra sus ideales, él nace de un
acto delictivo, de un golpe de estado. Alguien con ese prontuario no podrá
nunca ser efectivo contra sí mismo.
Seguro estoy que las regiones del país seguirán sufriendo
apagones diarios, porque eso no afecta el modo de vida del presidente, ni la de
su familia en Miraflores.
Seguro estoy que nunca sabremos lo que realmente ocurrió con
las explosiones de CAVIM ni de las Refinerías. Nunca sabremos quien estuvo
detrás de las muertes de Plaza Francia, del asesinato de Danilo Anderson , ni
mucho menos de los miles de muertos que van en estos últimos 14 años.
Hugo Chávez siempre dice querer tender puentes, en este caso
para los 6 millones de personas que no creemos en él ni en su proyecto, pero la
experiencia me dice que esas intenciones no le duran más de 7 días. Luego
seremos los mismos majunches, traidores y racistas de siempre. No puede
mantener su palabra, no lo hizo con sus compañeros de armas, mucho menos lo
hará con medio país al que él desprecia y desea que vivan fuera de Venezuela.
Ya lo dijo claramente “el que no sea socialista no es Venezolano”.
Mi TL en Twitter y Facebook me demuestra que aquellos que
apoyan al presidente no saben convivir, sino atropellar. Tienen la razón de la
impunidad. No importa lo que hagas o digas, contra quien o contra qué, siempre
y cuando te identifiques con Chávez. No he visto hasta el momento más que
insultos, atropellos, groserías. Esa es la enseñanza de su líder, la más
resaltante hasta el momento.
Sólo quedan 2 opciones, darse por vencido o seguir en la
lucha. Quizás tenga algo de Quijote, pero yo he resuelto continuar por el
camino de la unión, la concordia, la inclusión, la oportunidad para todos sin
importar el color de las franelas. Entiendo que no tengo espacio para crear un
mejor país junto al gobierno, esa no es su meta.
A mi parecer, el 54% de los venezolanos optó por vivir bajo
la sombra de las tinieblas de un Autócrata que siente a mi país, como su
reinado.